El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Zeid Ra’ad Al Hussein, ha expresado su preocupación por el impacto sobre los derechos humanos de muchas personas tras la decisión de Arabia Saudita, Emiratos Árabes, Bahréin y Egipto de romper las relaciones diplomáticas y económicas con el Qatar. En una declaración el miércoles, el funcionario de la ONU calificó las medidas que se han tomado como demasiado amplias en su alcance e implementación, lo que dificulta seriamente la vida de miles de mujeres, niños y hombres sólo porque pertenecen a una de las nacionalidades de los países involucrados en el conflicto. Subrayó que Arabia Saudita, Emiratos Árabes y Bahréin han emitido directrices para atender las necesidades humanitarias de las familias con nacionalidades mixtas, sin embargo estas medidas no son lo suficientemente efectivas para tratar todos los casos. El Alto Comisionado de las NN.UU. para los Derechos Humanos expresó su preocupación por la decisión de Emiratos Árabes y Bahréin de encarcelar y multar a cualquier persona que simpatice con el Estado de Qatar o se oponga a las acciones de su gobierno, describiendo estas medidas como una “clara violación del derecho a la libertad de opinión y de expresión”. Asimismo instó a todos los Estados implicados  a resolver la crisis mediante el diálogo a la mayor brevedad posible, a abstenerse a tomar medidas que afecten al bienestar, la salud y el empleo de sus ciudadanos y a respetar sus obligaciones en virtud de la legislación internacional sobre los derechos humanos.